NOVIEMBRE 5
Cada vez el recuerdo llega
en el instante de mí sufrir
y en mi cuerpo se congela
aquel dolor, que va a morir.
Pues muere dentro de mí
tu imagen, tu rostro, tu amor
que dejaste el alma en frenesí
con el olvido, desvanece tu calor...
a la ausencia de ti, amor
solo queda consolarme
con tus besos y el dolor
que en mi, tú lo dejaste...
siento el peso de mi agonía
pensando en tu partida
y con retorno a la lejanía
en el recuerdo de nuestras vidas.